España: Renta per cápita · 13 de diciembre de 2007
Entrevista a José Luis Rodriguez Zapatero en el diario El País. Larga, algo menos complaciente que las de hace años a otro presidente socialista, Felipe González, y sólo más interesante en el sentido de los tiempos, que son los de la famosa maldición china. Me voy directamente a lo que importa, la economía. Me encuentro con las sombras de hace veinte años, cuando estaban los Solchaga y los Boyer y todos esos chicos tan progresistas que iban a hacer de España un país más justo y desarrollado. Zapatero en la senda del cinismo. Zapatero en la huída hacia delante. Hechos:Pregunta sobre el boom inmobiliario. El presidente responde que crecemos demográficamente por la emigración y que se va a seguir construyendo; extraña finta la de atribuir la construcción al crecimiento demográfico: segun el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el año 2001 había 3.100.000 viviendas vacías en España, cantidad que no ha dejado de aumentar en términos relativos y absolutos. Lo que los bancos y las constructoras de los bancos llaman boom, los millones de personas que no pueden acceder a una vivienda lo llaman especulación inmobiliaria. Mercado especulativo, mercado para el dinero negro, mercado para la acumulación de capital, la Bolsa en versión ladrillo y cemento. Pero tres de cada cinco empleos dependen de la construcción. El presidente lo sabe y le parece un síntoma de progreso. Cita a EEUU («siempre en crecimiento»). Dice que España es un país «con espíritu de futuro, a diferencia de otros países occidentales». Afirma que vamos a superar a Alemania e Italia en renta per cápita. «Los vamos a coger».
Hemos pasado de trucos políticos con aroma a país desarrollado a trucos políticos con aroma a país subdesarrollado. «Los vamos a coger.» Espíritu deportivo; «nosotros» explícito, de selección nacional. Aznar lo decía a puñetazos. Zapatero, con actitud positiva de cursillo para ejecutivos. Tienen éxito: en la minoría mayoritaria de donde salen sus votos y los votos de otros como ellos. No tienen éxito: en el resto del espectro. Cada vez que confunden España con una república bananera, crean cultura de república bananera en los sectores más débiles. Donde no es posible, aumentan la brecha entre lo oficial y lo real. En la totalidad, desestructuran; siembran vientos. No serán ellos, no hoy, no esta élite, quien recoja las tempestades.
Pregunta: «¿Vamos a superar a Alemania en renta per capita?». Respuesta: «Sí. Claro que sí. Sí.» Pregunta: «¿En sólo dos o tres años?» Respuesta: «Sí, sí, De aquí al 2010 les podemos superar perfectamente (...) Es que el crecimiento de España está en el 4%. Creando empleo. Es que, insisto, el 60% por ciento de los puestos de trabajo que se crean en Europa se crean en España.» Trabajo basura en condiciones basura. Al entrevistador no le interesa y el presidente lo omite. Los ciudadanos deben malvivir para que cien millones de billetes de 500 euros, la cuarta parte de los emitidos por el Banco Central Europeo, estén en España. Dinero negro. Otra vez el mercado inmobiliario. Pero los vamos a coger en renta per cápita. Los vamos a arrasar en la media entre el Producto Interior Bruto (PIB) y la población del país. Que por supuesto, no mide las desigualdades. Que por supuesto, excluye las diferencias de renta.
Un austriaco de bigote cuadrado, pintor mediocre, político brillante, virus de la historia, explicaba: «uso la emoción para la mayoría y reservo la razón para la minoría». Zapatero nos quiere emocionar. No arroja coeficiente Gini a los cerdos.
Publicado originalmente en el diario La Insignia, de España. Enero del 2007.
— Jesús Gómez Gutiérrez