Justicia · 5 de abril de 2011
Trece mil trescientos días en prisión. Por delitos menores e intentos de fuga, en un estado acumulativo de prisión preventiva, según se afirma en la noticia del periódico. Es el preso más antiguo de España y se llama Miguel Francisco Montes Neiro. Hoy sale en las noticias porque el Supremo va a decidir, si no lo ha hecho ya, sobre su posible excarcelación; pero parece ser que durante trece mil trescientos días, ningún medio de comunicación se interesó por él ni encontró nada extraño en el caso.
Según los datos de Instituciones Penitenciarias (2006), España el país de la UE con la tasa de presos más alta, 146 por cada 100.000 habitantes, de los que el 22, 4% se encuentra en el limbo de la prevención. Catorce mil ciento setenta y nueve personas a la espera de un juicio que llegará algún día, en algún momento, si hay suerte. Catorce mil ciento setenta y nueve personas de las que no se habla nunca ni a derecha ni a izquierda, si es que la izquierda que nos queda se puede llamar así. Total, sólo son vidas de seres irrelevantes.
No sé si nuestro preso de hoy saldrá a la calle ni a qué situación, porque ésa es otra: qué puede hacer un ex presidiario después de pasar treinta y tantos años entre rejas. La comparación con los grandes delincuentes del país, que escapan sistemáticamente a la Justicia, es tan obvia que parecerá sobrante, pero es. Trece mil trescientos días en prisión. Uno de los catorce mil ciento setenta y nueve. Entró en 1976 y podría salir en el año 2011; o no.
Madrid, marzo.
Final: El supremo no excarcelará al preso más antiguo de España.
— Jesús Gómez Gutiérrez
Al rescate / El futuro del libro