Rita tiene un lagarto · 10 de diciembre de 2011

Así que no hay más opción que la República con rey a la británica en el Imperio alemán de repúblicas. Bueno, digo opción por decir algo, porque aquí no se puede elegir ni la calidad del folletín que nos escriben. Europa avanza, Europa retrocede, Rita la cantaora tiene un lagarto. Frases absurdas rellenas de absurdos que en España coinciden con el absurdo multimillonario, burbujista e igualmente casposo del Barça-Real Madrid. En el blanco y negro de la política y el fútbol, muere la política y muere el fútbol. Quizás cante en exceso, pero la mayoría traga.

Por mi parte, me quedo con Rita y el lagarto. Me parece que los medios de comunicación malgastan los eufemismos cuando una vez más, y ya van cuántas, se desgañitan para que creamos que esta vez sí, con independencia de qué sea sí y a quién convenga. Total, mañana vendrán los hechos y se lo pasarán todo por el forro. Y cuando se descubra que su forro no es un forro sino un plan del Capital, tal, tal, tendrán que estirar tanto los eufemismos que correrán el peligro de que la ciudadanía deje de tragar y diga ahivá, la hostia, esto me suena de antes.

Cuentan que la Revolución francesa y hasta la bolchevique empezaron así, por un sonar de eufemismo viejo. Podría ser. Por mucha explicación que se busque en los procesos históricos, siempre hay un desencadenante que convierte el runrún de un proceso en el catapún de un suceso. Un día te tocan las narices y no dices ni mu; al día siguiente te las tocan y les partes la cara. ¿Por qué preocuparse entonces? Rita la cantaora tiene un lagarto. Es un buen titular. Y los lagartos son simpáticos. A quién no le gustan los lagartos.

Madrid, diciembre.


— Jesús Gómez Gutiérrez


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