Icono · 22 de octubre de 2015
- Ya no cabe el ángel que buscaba
en cualquier abismo al olvidado,
no entráis en las cuevas ni en los cuartos de la servidumbre,
no miráis en la sombra de las cosas supuestas,
todo es una idea como un icono de arcilla,
y quien tiene un icono no necesita ver.
Lejos, profundos, los gritos: que no os llegan, que no os tocan,
tan perfectos en vuestras oraciones,
son cada día más y están más al margen,
sois cada día menos y estáis dónde estáis
si ya no cabe el ángel que buscaba
al excluido, lo excluido.
Madrid, octubre.
— Jesús Gómez Gutiérrez